Maratón BTT de Ayagaures

Por fin llegó la hora del reto maratoniano de la temporada de invierno. Este era el tercer maratón de BTT de Ayagaures y he estado en todos ellos. El primer año, mi estado de forma era realmente malo. Venía de una situación difícil y no estaba preparado para correr. Tampoco facilitó mucho las cosas que el tiempo se volviera loco, con 6 grados y granizada durante la prueba.

El año pasado mi forma era mejor, pero hacía mucho tiempo que no corría. Así que estaba demasiado tenso y quería demasiado. Eso acabó primero con una caída estúpida y luego con un pinchazo en una de las muchas rocas afiladas de la zona. Este año estaba bien preparado, tenía los hombros más bajos y el objetivo era hacerlo junto con Anja. Sería su prueba más dura hasta el momento.

Desde que estoy aquí trabajando para Life On 2 Wheels. He tenido la oportunidad de entrenar mucho en el curso. Lo conozco bien y me gusta mucho. Por supuesto, no puedo cambiar la pendiente de las subidas, y como corredor grande, las empinadas son las que más me duelen. 64 km y 1.600 metros de desnivel pueden no parecer mucho, ¡pero es una carrera dura! La superficie es un poco áspera y a menudo suelta. No es como las carreteras noruegas de grava dura que se pueden recorrer fácilmente con una bicicleta de carretera.

9 DE LA MAÑANA. Salida. Desde el principio en el valle de Ayagaures fuimos directos a la primera subida. Yo iba fuerte delante para ver quién tenía fuerzas para seguir, pero me contuve un poco para las últimas partes de la carrera. Cuando llegamos a la cima quedaba un trío delante - Yo, Javi Ramos y David García.

Nos íbamos turnando delante, pero durante la primera media hora fue más una carrera de transporte y táctica para ahorrar energía y probarnos un poco en las subidas. Después de la primera media hora, vinieron dos descensos de grava sueltos y rocosos. Me encantan los descensos y me dejé llevar para ver cómo se las arreglaban los demás. Javi me siguió, pero David no.

Luego vino el duro camino de tierra hasta la cantera. Recuerda más al lecho de un río que a una carretera, la verdad. Aquí dejamos que la suspensión total hiciera el trabajo y fuimos con marchas largas hasta la primera zona de alimentación. En este tramo habíamos conseguido una diferencia de 1,5 minutos con David.

En la zona de avituallamiento estaban los padres de Anja con botellas para apoyarnos y animarnos. Eso nos dio un poco de motivación extra, y fue genial pasar en primer lugar. Luego entramos en el nuevo bucle del recorrido de este año: Lomo Maspalomas. El tramo es un bucle de 10 km y es un sendero un poco más técnico, pero no pude despegar a Javi de mi rueda, ni siquiera cuesta abajo.

Pero luego pinchó.. Como hizo en Arguineguin. Me sentí mal, ya que quiero que gane el mejor y no por KO técnico. De repente me quedé solo delante y seguí empujando sin nadie alrededor. Es muy duro, ya que no tienes ninguna referencia sobre las diferencias de tiempo con los corredores de detrás o si estás ganando o perdiendo tiempo. Pasé la segunda zona de avituallamiento, todavía solo delante.

En la carretera de grava del camino de vuelta, las piernas empezaron a flaquear. Luego llegaron las dos subidas más duras. Miré atrás por un momento y vi que David estaba a un minuto de mí. Con su peso en el rango de 50 kg sabía que las dos subidas que se avecinaban le favorecerían, pero empujé lo que pude para mantener la brecha abierta.

Ninguna posibilidad. Me adelantó como un misil hacia el final de la primera, y en la cima de la segunda tenía una diferencia de 1:20. En el siguiente descenso por sendero técnico conseguí acortar la distancia en 1 minuto, por lo que sólo nos separaban 20 segundos.

No ayuda mucho cuando la siguiente subida es de casi el 20% y sigue subiendo después en el valle de Fataga. Las piernas me dolían mucho, pero no me rendía. Sabía que el último tramo por los caminos de tierra de vuelta a Ayagaures podría ser ventajoso para mí, ya que soy más grande y más fuerte.

De repente oí un ruido. ¡Había alguien detrás de mí! Antes ni se me había ocurrido fijarme en lo que pasaba detrás, y había pensado que Javi había terminado por hoy. Pero él tenía otros planes. Había arreglado su pinchazo y estaba de vuelta, lleno de energía y motivación. Atacó de inmediato, y no tuve tiempo ni de pensar cuando ya estaba fuera de su alcance.

Seguí empujando para mantener la distancia corta con él, pero nunca parecía conseguir recortar la distancia. En el "Gran Cañón" la carretera entra y sale de diferentes barrancos, así que los tres que íbamos delante podíamos vernos de vez en cuando. Eso me dio una motivación extra para seguir hasta la meta. Nunca se sabe lo que puede pasar. De repente se quedan sin fuerzas. Sobre la última colina y con vistas a Ayagaures me di cuenta de que la batalla había terminado por hoy. Rodé hasta la meta por encima de la presa y acabé en 3ª posición.

La competición fue fuerte y justa. Enhorabuena a Javi y David por su gran actuación. Hoy habéis sido simplemente mejores :)

Después de mi llegada estaba esperando a Anja. Habíamos estado entrenando durante toda la semana y habíamos repasado las secciones técnicas para estar bien preparadas. Era algo que queríamos hacer juntas. Pensé en ella muchas veces durante la carrera, y sabía que estaba ahí fuera esforzándose tanto como yo.

Estuve esperando junto a la presa final con sus padres y, cuando llegó, me sentí muy orgulloso y feliz. Es un reto difícil, pero ella terminó muy fuerte y acabó tercera en la general. Qué guay: las dos en el mismo escalón del podio.

Gracias a Ayagaures MTB por una gran carrera. ¡Esperamos volver el año que viene!

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